La función más importante que tienen los carbohidratos es la de brindar energía a nuestro organismo. Esto se da mediante procesos bioquímicos que se producen durante la digestión. Es decir,…
La función más importante que tienen los carbohidratos es la de brindar energía a nuestro organismo. Esto se da mediante procesos bioquímicos que se producen durante la digestión. Es decir, se da la liberación de la energía que contienen de los alimentos para ser aprovechadas por el organismo y de esta manera poder realizar nuestras actividades diarias tales como caminar, trabajar, jugar, estudiar, entre otras.
Los carbohidratos se clasifican de la siguiente manera:
- Simples: también llamados azúcares. Aquellos alimentos que son fuente de este tipo de carbohidratos solo nos aportan energía.
- Complejos: formado por carbohidratos digeribles o también llamados almidones y carbohidratos no digeribles (fibra). Aquellos alimentos que son fuente de este tipo de carbohidratos también aportan otros nutrientes como proteínas, minerales y vitaminas.
¿Qué sucede si no consumimos la cantidad adecuada de carbohidratos?
El consumo de los carbohidratos en nuestra dieta puede ser excesivo, deficiente o adecuado. Cuando el consumo es excesivo o deficiente se genera un desbalance de otros nutrientes tales como proteínas y grasas que afectan de manera negativa a nuestro organismo provocando enfermedades. A continuación, detallaremos que sucede con nuestro organismo cuando se produce este consumo inadecuado de los carbohidratos.
El consumo en exceso de este nutriente es el más conocido, generalmente porque el exceso se da con el consumo de carbohidratos simples como postres, pastas, arroz, bebidas azucaradas, entre otros. Este consumo en exceso genera una acumulación de grasas, la principal causa del sobrepeso y obesidad. Estas enfermedades incrementan el riesgo de padecer enfermedades crónicas tales como la diabetes, enfermedades coronarias, cáncer, hígado graso, apnea del sueño incluso osteoartritis.
Por otro lado, el consumo deficiente de los carbohidratos provocará la utilización de grasas y proteínas para satisfacer las necesidades energéticas desplazando las funciones de estos nutrientes a segundo plano. Este desbalance en individuos que se encuentran en etapa de crecimiento inducirá a que las proteínas no cumplan con la función principal de formación de tejidos, esto ocasionará una para en el crecimiento o una disminución del ritmo de crecimiento. En una persona adulta, la función de regeneración y mantenimiento se verán interrumpidas provocando susceptibilidad a enfermedades.
Dentro del deficiente consumo de carbohidratos tenemos también el déficit del consumo de fibra. Esto genera problemas como estreñimiento, irregularidad en la consistencia de las heces, mayor incidencia en problemas del colon como hemorroides, divertículos e incluso cáncer.
Recomendaciones para un adecuado consumo de carbohidratos:
- Disminuir o eliminar el consumo de azúcar para endulzar bebidas.
- Incrementar consumo de menestras y cereales integrales, si son de granos andinos mejor.
- Incrementar el consumo de verduras y frutas (recuerda son 400 gramos diarios y las verduras no deben ser reemplazadas por las frutas, porque estas tienen azucares que pueden generar exceso de peso).
- Preferir las frutas en su estado natural. Si se puede con cascara mejor. Evitar jugos.
- Limitar el consumo de productos azucarados como dulces o pasteles, gaseosas y jugos envasados.